La inteligencia artificial (IA) ha tenido un impacto significativo en los sistemas de vigilancia. La IA se ha utilizado para mejorar la eficiencia y la precisión en la vigilancia, lo que ha llevado a una mayor seguridad en muchos entornos. Según un artículo de Ventas de Seguridad, la IA ayuda a automatizar la respuesta a incidentes, acelerando la identificación de amenazas y la aplicación de contramedidas.

La IA también ha mejorado la capacidad de análisis avanzada, lo que permite detectar patrones de comportamiento sospechoso de manera eficiente y precisa, lo que ayuda a mantener la seguridad de sistemas y a prevenir delitos.

En resumen, la IA ha tenido un impacto significativo en los sistemas de vigilancia, mejorando la eficiencia y la precisión en la vigilancia. Sin embargo, también ha planteado preocupaciones éticas y de privacidad que deben abordarse a medida que la IA se vuelve más omnipresente.